Al principio no sabía qué buscaba, ni tampoco pretendía nada en concreto, sí recuerdo que en mi mente estaba la idea de lograr ser una anciana ágil y flexible que pudiera preservar por muchos años la inteligencia innata de su cuerpo. Y acerté, escogí el camino adecuado.
Desde entonces he continuado practicando, indagando y formándome cada día.